Sócrates no sólo era una persona sumamente práctica sino que se dejaba querer, en el sentido de que sus discípulos esperaban su amor, cosa que daba solamente como amor a la sabiduría, o amor al Amor, sabiendo muy bien que el amor trascendia a los seres humanos o a los civiles, que eran hermanos entre sí, característica de la ciudad helena. la ciudad helena era muy poco humana. el problema con el extranjero o con el otro, Alio, era de incomunicacion, por eso le daban órdenes para que trabaje, pero no para que hable, pues debía enseñarsele a ser agradecido, a dar gracia, a inspirar respeto. su padre Sofronisco era escultor, trabajo que también desempeñó Sócrates temporalmente, y su madre, Faenerete, fue comadrona, oficio al que se sentía íntimamente ligado el filósofo, ya que a lo largo de su vida se dedicó, igual que una partera, a ayudar a parir a los demás, no hijos, sino ideas. Aristófanes en Las nubes, en la que el filósofo "en su negocio del pensamiento" se dedicaba a enseñar el arte de las contradicciones ocultas a sus discípulos. Se dice que la condena a Sócrates fue motivada precisamente por sus comedias, o por las denuncias que las comedias hacen de sus permanentes bromas a la razón, que al fin y al cabo es la Verdadera Razón, afirma: "Este charlatán desvía a la juventud de nuestras enseñanzas".
En el el caso de doctor House, su problema es de amar o confundirse con el amor, por individualizar personas. lo cual le permite diagnosticar conociendo la vida de cada paciente y su narrativa, para saber cómo oculta sus vergüenzas. House envía mal sus señales de amor porque no cree en ideas innatas, sino en neurotransmisores. Hay otro ejemplo en la cuarta temporada, en el capítulo "Lo correcto",
cuando el "Dr. Love" acepta participar en un experimento que podría salvar la vida de un paciente. El experimento requiere que este doctor beba alcohol, lo que va en contra de sus creencias religiosas; le dice a House que había logrado convencerlo gracias al razonamiento con que le había hecho la petición. "Me dio un buen argumento", afirma, con lo que House queda impresionado y sorprendido."Por lo regular los argumentos racionales no surten efecto en la gente religiosa, de lo contrario, no habría nadie religioso".La razón, y no la fe, es lo que da resultados en el mundo real.
De nuevo en "Buenas intenciones", House reprende a la hermana Augustine cuando ésta rechaza el tratamiento médico, prefiriendo dejar su vida en las manos de Dios. "¿Está usted tratando de hacerme desistir de mi fe?" pregunta ella, a lo que House responde: "Puede creer todo lo que quiera en espíritus, en la otra vida, en el cielo y el infierno, pero cuando se trata de este mundo, no se haga la idiota, porque usted puede decirme que pone su fe en Dios para llegar al final del día, mas cuando se trata de cruzar la calle, estoy seguro de que mira a ambos lados". Aquí House está haciendo hincapié en la idea de que la fe puede proporcionar tranquilidad o hacernos sentir bien, pero los asuntos prácticos requieren raciocinio y evidencia. (Jacoby- 15).
IRWIN, JACOBY: LA FILOSOFÍA DE HOUSE. TODOS MIENTEN, Traducción: María Jesús Herrero Díaz y Juan Antonio Otero. Mexico DF, 2009